Las condiciones sociopolíticas y culturales de los últimos años, marcadas por el enorme avance del feminismo, la conquista de derechos y la igualdad, no pueden ser desconocidos por la Honorable Cámara de Diputados. Tenemos que actualizarnos a los tiempos que corren para evitar perpetuar situaciones de discriminación.
Por eso, es fundamental que el Reglamento de la Cámara baja incluya el #LenguajeInclusivo.
¿En qué consiste el Proyecto de Lenguaje Inclusivo y No Sexista?
El proyecto pretende incorporar al artículo 121 bis al Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados/as de la Nación el Lenguaje inclusivo y no sexista.
¿Cuáles son sus objetivos?
- Realizar todas las modificaciones necesarias a fin de incorporar el lenguaje inclusivo y no sexista en el Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados/as.
- Exigir que los proyectos de ley, de resolución y de declaración deben redactarse usando lenguaje inclusivo y no sexista.
- Legislar y promover medidas de acción positiva que garanticen la igualdad real de oportunidades y de trato, y el pleno goce y ejercicio de los derechos reconocidos por esta Constitución y por los tratados internacionales vigentes sobre derechos humanos.
¿Cuáles son sus principios fundamentales?
El proyecto de Ley de Lenguaje Inclusivo y No Sexista basa sus principios sobre la aplicación de la legislación internacional de Derechos Humanos en relación con la orientación sexual y la identidad de género, conocidos como “Principios de Yogyakarta”, en donde los Estados se comprometieron a adoptar todas las medidas apropiadas para alcanzar la eliminación de actitudes y prácticas prejuiciosas o discriminatorias basadas en la idea de la inferioridad o superioridad de cualquier orientación sexual, identidad de género o expresión de género.
¿Cómo se aplica la Ley?
Al modificar el Reglamento de la Honorable Cámara de Diputados/as de la Nación, todos los proyectos de Ley, de Resolución y de Declaración deberán redactarse usando lenguaje inclusivo y no sexista.
El uso del masculino como forma generalizadora se ha vuelto casi obsoleto en el lenguaje cotidiano de las nuevas generaciones. Por una perspectiva igualitaria y con equidad de género!